
¿Cuándo se cambia la hora?
Este año, el cambio de hora de otoño se producirá en la madrugada del domingo 26 de octubre de 2025. A las 3:00 de la mañana, los relojes se retrasarán una hora, pasando a ser las 2:00. Esto significa que dormiremos una hora más, pero también que anochecerá antes, afectando directamente a la cantidad de luz natural disponible en nuestros hogares por las tardes.
Este ajuste, conocido como inicio del horario de invierno, se realiza con el objetivo de ahorrar energía aprovechando mejor la luz solar. Sin embargo, en la práctica, el cambio puede implicar un aumento del consumo eléctrico en casa, especialmente en iluminación y calefacción.
En este artículo te contamos cómo afecta el cambio de hora a tu consumo energético y qué pequeñas acciones puedes aplicar en tu vivienda para gastar menos.
Menos luz natural = más consumo
Con el cambio de hora en otoño, anochece antes. Eso significa que en casa:
Encendemos las luces artificiales antes.
Pasamos más tiempo en interiores (más uso de televisión, ordenadores, calefacción, etc.).
La iluminación se vuelve uno de los principales consumos eléctricos diarios.
En viviendas con mala orientación o poca entrada de luz natural, el impacto puede ser mayor.
¿Y si tu casa no está preparada?
Una vivienda mal aislada o con una orientación que no favorece la entrada de luz natural puede convertir un pequeño ajuste horario en un aumento significativo en la factura:
Ventanas antiguas = más gasto en calefacción.
Bombillas incandescentes o halógenas = más consumo innecesario.
Distribución poco funcional = zonas mal aprovechadas en las que se encienden luces que no se necesitan.
Qué puedes hacer para ahorrar tras el cambio de hora
1. Revisa la iluminación
Sustituye bombillas por LED.
Aprovecha lámparas auxiliares en vez de encender todas las luces.
2. Aprovecha al máximo la luz natural
Mantén las cortinas abiertas durante el día.
Usa colores claros en paredes y textiles para reflejar la luz.
Coloca zonas de trabajo o estudio cerca de ventanas.
3. Mejora el aislamiento
Si las ventanas son antiguas, considera cambiarlas para mejorar el aislamiento.
Cierra persianas por la noche para mantener la temperatura.
Considera invertir en doble acristalamiento si aún no lo tienes.
4. Reorganiza tus rutinas
Adelanta ciertas tareas a horas con más luz natural.
Cocina o haz actividades domésticas cuando no necesites luz artificial.
El cambio de hora puede parecer un pequeño cambio insignificante (al fin y al cabo, solo se atrasa el reloj una hora) pero puede reflejarse claramente en tu factura de luz si no tomas medidas. La buena noticia es que con pequeños cambios puedes hacer que tu casa trabaje a tu favor, ahorrando energía y ganando calidad de vida.